El gobierno británico está introduciendo reformas radicales para hacer frente a los crecientes niveles de migración neta. En general, la medida pretende responder a la creciente presión pública y a las estadísticas récord de migración.
Se anuncian normas más estrictas para los visados
En primer lugar, el gobierno acortará la duración del Visado de Graduado de dos años a 18 meses. En consecuencia, esta medida afecta a los estudiantes internacionales que esperan trabajar después de graduarse. Las autoridades también están estudiando una tasa para reinvertir en el sistema de enseñanza superior y de capacitación.
A continuación, la vía del visado para trabajadores cualificados también se enfrenta a requisitos más estrictos. A partir de ahora, sólo podrán optar a él los empleos de nivel universitario. Además, el gobierno ajustará los salarios en consecuencia al mayor nivel de cualificación. Mientras tanto, el Reino Unido sólo permitirá entrar en el sistema de inmigración a los trabajadores menos cualificados por tiempo limitado.
Además, el gobierno va a poner fin al patrocinio de visados para cuidadores. Este cambio se dirige específicamente a la inmigración poco cualificada, sobre todo en los sectores sanitario y de asistencia social.
En otro cambio importante, el camino hacia la ciudadanía británica será más largo. La elegibilidad para la residencia pasa de cinco a diez años.
Además, todos los solicitantes de visado deben cumplir ahora unos requisitos más estrictos de lengua inglesa. Por tanto, esta norma afectará por igual a estudiantes, trabajadores y solicitantes de visados familiares.
Starmer promete una reducción de la migración
Según el primer ministro Keir Starmer, las nuevas normas sobre visados e inmigración forman parte de los esfuerzos por «recuperar el control» de las fronteras del Reino Unido. Advirtió que el Reino Unido debe evitar convertirse en una «isla de extraños».
Por su parte, la ministra del Interior, Yvette Cooper, subrayó la necesidad de reducir la dependencia de la mano de obra extranjera. Argumentó que estos cambios impulsarán la formación y las oportunidades laborales de los trabajadores británicos.
Reducir la migración, reforzar la frontera
Los funcionarios calculan que estas medidas podrían reducir la migración neta en 100.000 personas al año. Esto coincide con las promesas políticas de larga data de reducir la migración.
Sin embargo, el impacto podría extenderse a toda la economía. En particular, los sectores sanitario y educativo dependen en gran medida del personal y los estudiantes extranjeros. En consecuencia, estas nuevas normas pueden agravar las carencias de personal y reducir los ingresos por matrícula.
Sin embargo, el gobierno insiste en que las reformas son necesarias para la sostenibilidad a largo plazo. Sostiene que el Reino Unido debe centrarse en el talento autóctono.
Reacciones y preocupaciones
Los críticos sostienen que el gobierno está complaciendo el sentimiento antiinmigración. Algunos diputados acusan a los ministros de hacerse eco de la retórica de extrema derecha para obtener beneficios políticos.
En cambio, los proveedores de residencias de ancianos advierten de una grave escasez de personal. Muchos afirman que la supresión de los visados para cuidadores causará un perjuicio real a los pacientes ancianos y discapacitados.
Las universidades también expresaron su preocupación por las normas sobre visados y migración. Creen que acortar la vía del visado de postgrado podría disuadir a los estudiantes internacionales de elegir instituciones británicas.
Aun así, el gobierno se mantiene firme en su postura. Los funcionarios insisten en que los cambios son equilibrados y reflejan la voluntad de los ciudadanos británicos.
Perspectivas de futuro
En resumen, las nuevas normas sobre visados del Reino Unido pretenden reducir la inmigración al tiempo que fomentan el empleo nacional. Sin embargo, el cambio de política puede tensar sectores clave y suscitar un debate político.
Aunque algunos consideran que las reformas llegan con retraso, otros temen daños a largo plazo para la economía y la reputación mundial. Los próximos meses revelarán todo su impacto.
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